Después de la pandemia por COVID-19 las recetas caseras y tomas “milagrosas” han llenado el espacio en la plataforma de videos.

El gigante de videos YouTube informó el pasado martes que implementará medidas para eliminar de sus contenidos toda la información falsa en materia de salud. Desde el año pasado, la compañía hace un esfuerzo continuo para desarrollar su política de desinformación médica.

El comunicado dice que se prohibirán "contenidos que promuevan tratamientos contra el cáncer que hayan demostrado ser nocivos o ineficaces, o contenidos que disuadan a los espectadores de buscar tratamiento médico profesional", publicado a través de un blog con el Dr. Garth Graham, responsable de YouTube Health.

Uno de los ejemplos que dio la compañía se refiere a la afirmación engañosa de que los pacientes deberían "tomar vitamina C en lugar de radioterapia” o que “el ajo es la cura para el cancer”. Esta noticia es tan solo uno de los pasos para reforzar su política además de prohibir las afirmaciones falsas sobre vacunas y abortos, y los contenidos que promueven o glorifican los trastornos alimentarios.

Básicamente, el plan consiste en prohibir todo lo que contradiga a las autoridades sanitarias locales o a la Organización Mundial de la Salud. Adicional a esto, el doctor Graham dijo que la política está diseñada para preservar "el importante equilibrio de eliminar contenidos atrozmente perjudiciales al tiempo que se garantiza el espacio para el debate y la discusión".