Esa sensación de cansancio, letargo, ojos rojos al levantarnos después de dormir muchas horas tiene una explicación y una solución.

Contario a lo que creeríamos, el dormir horas de más para compensar el trasnocho de días atrás no hace que nos sintamos enérgicos. Por el contrario, los expertos lo llaman “Embriaguez de sueño” y tiene que ver con nuestro reloj interno que se adapta a la hora que nos levantamos cotidianamente.

 

 

Es por esto, que cuando dormimos demasiado nuestro organismo se activa como si estuviera despierto. Las células del cuerpo continúan recibiendo la señal de usar la energía y al mismo tiempo experimentan el estar dormidas. Esta confusión genera la sensación de cansancio al despertar.

Para evitar este mal, expertos recomiendan ciertas pautas diarias para poner en práctica: disponer de una cama y almohada acordes a nuestras necesidades, seguir un horario (7 u 8 horas cada noche) y rutina de sueño que permita descansar incluso durante los fines de semana, tener el dormitorio limpio, fresco, aislado de luz y ruido. Además, se concluye con evitar las comidas copiosas, alcohol, café, tabaco horas antes de ir a dormir.